una de las cosas que me cansa es pretender. lo que pasa por mi cabeza se refleja en mi cara y a veces más específicamente en mis ojos. y aunque desde niños nos entrenan a contestar "bien" cuando alguien te pregunta "¿cómo estás?" a veces se vuelve agotador. especialmente cuando 20 personas te hacen la misma pregunta en el lapso de algunos minutos. pero tampoco tendría sentido no contestar "bien". especialmente cuando esas 20 personas don't actually care. pero la verdad es que una respuesta más elaborada no vale la pena tampoco. tengo la teoría de que la tristeza es igual de necesaria que la alegría. lo que no creo es en la depresión. quizás hablo desde la ignorancia pero encuentro que la depresión es un invento. todos tenemos, en algún momento de la vida, más de una razón para deprimirnos. y no se trata de ignorar las emociones, uno debería aceptar la tristeza. pero hasta ahí queda. uno sigue viviendo... porque hay tantas razones para vivir. me imagino que la depresión nace de la soledad. de no encontrarle sentido a nada. gracias a Dios todo tiene sentido para mi. o quizás decir todo es un tanto exagerado. pero vivir, y todo lo que eso implica, tristezas y alegrías incluidas, tiene sentido.